Vacuna de Merck, hace más probable infección con vírus VIH

POR LUIS MIRANDA | THE REAL AGENDA | 26 MAYO 2012

Es bastante normal que se dude cada vez que se lee un estudio científico en una revista médica. Si hay una cosa que el público ha aprendido acerca de la ciencia en la última década más o menos, es que cuando se habla de ciencia, aún cuando es exacta, siempre hay margen para el error. A veces los errores son cometidos deliberadamente, como en el caso de la ciencia del clima. A pesar de vivir en una época de gran avance tecnológico y científico nunca se puede ser demasiado cauteloso al afirmar un hecho. Hoy más que nunca, los periodistas y el público que leen los artículos noticiosos necesitan hacer su propia investigación con el fin de asegurar la validez de los hechos presentados.

Una particularidad de la información científica es que cuando está sirve un propósito comercial es rápida e imprudentemente puesta a la vista de todos, pero cuando esa información no es de gran valor comercial o hace que la ciencia o antiguos descubrimientos científicos obsoletos, esa información es censurada o apenas publicada en la parte posterior de los periódicos y revistas, a menudo escritos con letras en tamaños minúsculos. Este es el caso del estudio más reciente sobre los peligros de la vacuna creada para prevenir el contagio con el virus del VIH. Yo sabía que tenía que cavar profundo para encontrar cualquier información sobre este tema.

Las vacunas, independientemente de lo que la mayor parte de la comunidad científica dice, son productos tóxicos cuyo uso a menudo trae consigo efectos secundarios no deseados y en numerosas ocasiones, causan la muerte. El debate sobre la toxicidad de la vacuna y los peligros que estos productos presentan a los usuarios por lo general se centra en dos puntos. En primer lugar, ¿cómo puede una vacuna causar directamente la enfermedad que dice curar o tratar, o inclusive la muerte?, y en segundo lugar, ¿cómo puede una vacuna indirectamente la enfermedad que dice curar o tratar, o inclusive la muerte? Tenga en cuenta que ninguno de los puntos es acerca de cómo puede una vacuna tratar o curar una enfermedad, para usar dos términos procedentes de la clase médica. Eso es porque nunca se ha demostrado que ninguna vacuna ha ayudado a tratar o curar ninguna enfermedad. De hecho, el establecimiento médico-militar está cada vez más dispuesto a utilizar las vacunas como armas, en lugar de soluciones médicas a enfermedades reales.

Vacuna de Merck Falla en los Ensayos Clínicos

En el caso de la vacuna contra el VIH producida por Merck, que estaba siendo sometida a estudios en humanos, los resultados de las observaciones de seguimiento hicieron que científicos advertieran al público sobre el vínculo entre la vacuna y el aumento de la probabilidad de que los hombres se infecten con el el virus del VIH. Según el estudio publicado en la revista Journal of Infectious Disease, la vacuna de Merck hace más probable que algunos hombres se infecten con el VIH. Anteriormente, los científicos que realizaron las pruebas dijeron que no podían decir por qué la vacuna aumenta las posibilidades de infección, y simplemente dijeron que los hombres que no han sido circuncidados, y que anteriormente contrajeron el virus del resfriado común son de dos a cuatro veces más suceptibles a ser infectados con el VIH. Parece que el virus de la gripe es usado por Merck para producir la vacuna, por lo que cualquier hombre que coge la misma cepa del virus de la gripe aumenta sus posibilidades de infección en comparación con otros hombres.

Yo no soy un científico o médico, pero me parece que este es un caso donde la cura es más peligrosa que la enfermedad. El problema con la vacuna de Merck es una situación vieja y bien conocida. La mayoría, si no todas las vacunas, están hechas con ingredientes que son peligrosos para los seres humanos. La lista es larga, y los ingredientes se dividen en las categorías antes mencionadas: las vacunas que causan daño directo y las vacunas que desencadenan una reacción que causa la enfermedad. En el caso de la vacuna contra el VIH, el segundo escenario parece un buen lugar para que los científicos a cargo de las pruebas estudien más a fondo.

El uso de un virus de la gripe que, en teoría no es capaz de hacer que la gente se enferme con un resfriado, contiene los tres genes del virus del VIH, una combinación que tiene la intención de utilizar el principio citado por el establecimiento médico – ampliamente desacreditado – que mediante la inyección de un agente patógeno en el cuerpo humano, el sistema inmune humano puede ser ‘educado’ para hacer frente a futuras infecciones causadas por el mismo vírus. La mayoría, si no toda la investigación científica se basa en este mismo principio, no importa que las empresas farmacéuticas no hayan logrado producir una vacuna que realmente haga lo que dicen que hace: curar o tratar enfermedades. Lo que es aún más preocupante, es que además de estafar al público para que confíe en un producto que no funciona como se anuncia, la industria farmacéutica en realidad inyecta genes de virus peligrosos que se supone tienen como fin prevenir o tratar la enfermedad.

“Realmente me gustaría poder decir por qué, pero no puedo”, dijo la Dra. Ann Duerr, especialista en vacunas en el Fred Hutchinson Cancer Research Center en Seattle y que también dirigió el estudio. En un estudio anterior, Merck había dado la vacuna a un total de 778 voluntarios de sexo masculino, una cifra que incluyó a hombres que tenían una fuerte inmunidad contra el virus de la gripe Ad5 (utilizado para fabricar la vacuna) y otros hombres que no tenían dicha inmunidad. Al final del estudio, – y esto va por los resultados publicados de Merck, el análisis no es independiente, 21 de los hombres que recibieron la vacuna resultaron infectados con el VIH, mientras que sólo 9 fueron infectados en el grupo de los hombres que recibieron placebo. La vacuna conocida como V520 está hecha con adenovirus tipo 5 que fue modificado genéticamente para no reproducir gripe, por lo que Merck y sus científicos creen que el virus tiene la culpa de las infecciones. Esta es una forma común en que las compañías farmacéuticas actúan, es decir, culpan a un ingrediente de las vacunas por el fracaso en la entrega de los resultados prometidos. Es menos común para los científicos que trabajan en la producción de vacunas culpar a los genes que causan la enfermedad, los cuales están en la vacuna – en este caso los genes del VIH — de haber causado la infección. Dicha concesión, supongo, erosionaría más la credibilidad de las farmacéuticas y su modus operandi de crear vacunas.

El último fracaso de Merck para crear una vacuna ”segura” ha hecho que médicos que apoyan a dicha empresa así como el modelo médico tradicional, salgan como bomberos  para tratar de salvar la cara. El doctor Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de E.E.U.U., recurrió a las buenas viejas mentiras para validar el fracaso de la investigación de la vacuna: “Históricamente, las vacunas han sido el arma más eficaz contra las enfermedades infecciosas como la poliomielitis, el sarampión, las paperas y la viruela “. ¿Estará hablando en serio?

Otro ensayo de Merck, que incluyó a 3000 personas en 9 países terminó abruptamente en 2007 después de que los resultados no mostraron efectos positivos tras la inyección y los voluntarios comenzaron a presentar síntomas de infección o susceptibilidad a la infección con el VIH.

El último de los ensayos médicos de Merck incluyó 1836 personas. Un total de 172 hombres que participaron en el estudio en última instancia se infectaron. Esos hombres eran altamente inmune al virus Ad5 y sólo en los estudios anteriores fueron citados como circuncidados. Según el Dr. Anthony S. Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, los resultados “añaden credibilidad a la creencia de que el efecto era real”. El explica que las infecciones observados en voluntarios podría haber sido de origen biológico.

La Dra. Duerr, que en el pasado no tenía ninguna explicación sobre el porqué de las infecciones con el VIH después de haber sido inyectados con la vacuna ahora cree que los hombres que habían contraído el adenovirus y tenían anticuerpos contra él y un conjunto de células CD4 (células blancas de la sangre) tenían sistemas inmunológicos capaces de reconocer dichos anticuerpos y más células CD4 estaban presentes en su sangre. La Dra. Duerr dice que si bien es una buena cosa tener más células CD4, en este caso, esas células son exactamente lo que los genes de los virus del VIH atacan. Bingo!

Hablando objetivamente, y tomando la palabra de la Dra. Duerr por su valor nominal, esto es un ejemplo de cómo la comunidad científica experimenta con la salud y el bienestar de la humanidad al realizar experimentos basados en premisas y principios obsoletos y en el proceso, a veces a propósito, creando productos farmacéuticos que causan enfermedad, en lugar de tratar o curar a las personas. Buena prueba de lo que parece ser una ignorancia completa sobre el resultado final de su experimento es la conclusión de la Dra. Deurr acerca de lo que su experimento significa: “. La vacuna podría haber sido la creación de lo que el ejército llama “un ambiente rico en blancos” ¡Qué gran analogía , especialmente ahora que sabemos que el Pentágono tiene la intención de usar las vacunas para hacer que las personas se vuelvan obedientes, como se muestra en un vídeo del Departamento de Estado sobre el que informamos en Abril.

Experimentos humanos a pesar de los riesgos

La falla continua para producir una vacuna que puede tratar o curar el SIDA parece hacer que los científicos más audaces, en su búsqueda por un gran avance, siguen haciendo caso omiso de los peligros, y exponen a los pacientes a productos farmacéuticos cuya creación está basado en cero ciencia poniendo en duda el futuro saludable de los seres humanos. Parece como si los científicos estuvieran experimentando con la intención de “ver lo que puede salir de sus ensayos”, en lugar de esperar un número de resultados concretos que puedan haberse pensado en el ejercicio de su investigación. Otro ejemplo para apoyar este punto de vista es que ahora los científicos que están detrás de las vacunas contra el VIH empezarán a buscar ideas en el uso de un virus de los chimpancés para crear otra versión de la vacuna. ¿Pero no era un virus de la inmunodeficiencia de simio (SIV), el que es acreditado por haber originado la epidemia del SIDA? Eso es lo que gran parte de la comunidad científica acepta hoy en día.

Por supuesto que otros que han investigado más sobre el origen del virus del VIH han aprendido que la infección se produjo a través de la vacuna contra la poliomielitis, que se había confeccionado utilizando una cepa de virus de la inmunodeficiencia de simio. Como se informó por el periodista Edward Hooper, el VIH se remonta a la prueba de una vacuna oral contra la polio llamada Chat. Esta vacuna se administró a cerca de un millón de personas en el Congo, Ruanda y Urundi a finales de 1950. La vacuna necesitaba ser cultivada en tejido vivo, y entonces los creadores usaron células de riñón tomadas de chimpancés infectados con SIVcmz. El resultado fue la contaminación de la vacuna y como consecuencia la contaminación de los seres humanos con VIH-1.

Orígenes del VIH

Quizás la persona que ha tenido menos pelos en la lengua cuando se trata de el verdadero origen del virus del VIH es el Dr. Boyd E. Graves, que presentó una solicitud de Libertad de Información en EE.UU. para hacer público el programa especial de virus, que según él contiene detalles sobre la creación de VIH. El Dr. Graves publicó un gráfico llamado la Tabla de Viruses Especiales en 1971, que parece explicar el origen de muchos de los virus conocidos hoy en día y como estos causan enfermedad en los seres humanos. Entre ellos está el VIH. Otra fuente que apoya la posición del Dr. Graves es un libro que se llama Full Disclosure, escrito por el Dr. Gary Glum, publicado en 1994, pero obstruido para la venta en las librerías por el gobierno de los EE.UU.. Un extracto del primer capítulo del libro describe el origen del VIH:

El SIDA fue el resultado de un programa de investigación de décadas de duración llevado a cabo en los laboratorios de química y bacteriológía en este país (EE.UU.) y otros. Para los interesados, es un triunfo de la ciencia y la respuesta a lo que consideran el problema más urgente del planeta: control de la población. El SIDA es el arma biológica perfecta. Puede limitarse a un cierto grado de éxito con grupos específicos, y el período de incubación puede ser de más de siete años, millones pueden ser infectados antes de que la primera persona en la cadena muestre algún síntoma.

Lea más sobre este libro censurado escrito por el Dr. Glum aquí.

Un punto que a menudo es pasado por alto por el público y poco divulgado por los medios es, ¿cómo puede la comunidad médica proponerse buscar una cura o un tratamiento para una enfermedad causada por un virus o cualquier otro patógeno sin estar seguro sobre el origen de tal virus? Esta situación ocurre con el VIH y el SIDA. No hay forma más fácil de entender este dilema que ver el film House of Numbers, que cuenta sobre la falta de consenso sobre el origen, diagnóstico y tratamiento del VIH.

¿No será que desde el punto de vista científico esta incertidumbre sobre el orígen torna cualquier vacuna o pastilla inútil?