Operadores de Escáneres en Aeropuertos Sufren de Cáncer
June 29, 2011
Por Luis R. Miranda
The Real Agenda
28 de junio 2011
Ha tomado solamente unos pocos años para que las consecuencias de la continua exposición a la radiación de los escáneres se manifieste. Los operadores de escáner a los cuales muchos pasajeros están sujetos antes de abordar un avión descubrieron grupos cancerígenos en sus cuerpos después de sólo una década o menos de trabajar con estas máquinas. El descubrimiento de esta información se llevó a cabo después de que el Centro de Información sobre Privacidad Electrónica obtuvo documentos que muestran cómo los trabajadores de aeroportuarios enfermaron de cáncer, problemas cardíacos y cerebrovasculares.
En lugar de proporcionar a los trabajadores con una atención médica adecuada y, realizar las evaluaciones del caso en las máquinas, la Agencia de Seguridad Aeroportuaria (TSA), trató de mantener este asunto en silencio para evitar una oposición aún mayor a los escáneres instalados en muchos aeropuertos alrededor de los EE.UU. y el mundo. Es la proximidad y continua exposición a la radiación del escáner lo que causó que varios trabajadores que comenzaron a usar los escáneres al comienzo de 2003 ya sufran de condiciones médicas irreversibles.
Incluso cuando los empleados y supervisores con frecuencia solicitaron medidores de radiación a fin de evaluar con realismo la cantidad de radiación a que se estaban exponiendo, la TSA no honró esas solicitudes. De hecho, la TSA no había evaluado los escáneres para determinar la seguridad o inseguridad de los mismos. Aunque la secretaria de Seguridad Nacional de EE.UU., Janet Napolitano, dijo varias veces que las máquinas eran seguras, la verdad es que un estudio citado por la TSA y Seguridad Nacional era falso. El estudio que de acuerdo con Napolitano había sido hecho por el Instituto Nacional de Estándares y Tecnología (NIST), en materia de seguridad de los escáneres, en realidad nunca tuvo lugar. NIST salió recientemente a “lavarse las manos”, e indicó que el Instituto Nacional de Estándares y Tecnología nunca realizó las pruebas de seguridad en los escáneres de cuerpo entero.
Al parecer la alarma sobre los casos de cáncer comenzó cuando el director adjunto de seguridad federal en Boston Logan International Airport, manifestó preocupaciones relacionadas al número de trabajadores diagnosticados con cáncer. En un correo electrónico cuyo asunto dice: “Boston cancer+Radiation Safety and health risks concerns”, el director suplica una vez más para que se envíen los dispositivos de vigilancia radiológica solicitados en varias ocasiones. En ese mismo e-mail destaca su preocupación y la de muchos otros trabajadores por “el número de operadores diagnosticados con cáncer” y “nuestra preocupación de que TSA haya monitoreado erróneamente la amenaza que enfrentan por la radiación tanto la los operadores como los encargados de monitorear el equipaje de los pasajeros”.
Algunos trabajadores de TSA manifestaron su preocupación por la exposición a radiaciones en los últimos meses alegando que la propia TSA no había compartido sus conclusiones en relación con la seguridad de exposición a la radiación. De acuerdo con Infowars.com, el doctor David Brenner de la Universidad de Columbia encontró que “los escáneres corporales probablemente conducirán a un aumento de un tipo común de cáncer de piel llamado carcinoma de células basales, que afecta a la cabeza y el cuello.” Además, el Dr. Michael Love, del departamento de biofísica y química biofísica en la Universidad Johns Hopkins, dijo públicamente que “estadísticamente alguien va a tener cáncer de piel por la radiación emitida por estas máquinas”.
“Realmente no hay otra tecnología que podamos usar con rayos X que no contamine un número enorme de personas. Es realmente sin precedentes en el mundo de la radiación “, afirma Brenner. Mientras que los científicos y los medios alternativos advirtieron sobre los peligros de los escáneres, el gobierno de EE.UU. dijo que las máquinas eran seguras.
Muchos profesores de ciencias y otros científicos advirtieron al gobierno acerca de la poca o ninguna investigación que existía respecto a la seguridad de los escáneres de cuerpo entero. Algunos de ellos sugirieron que debería haber formas diferentes de lograr los mismos objetivos que el gobierno, sin necesidad de perjudicar a los trabajadores y los pasajeros. “Todavía no hay datos rigurosos, claros, para determinar la seguridad de los escáneres usados en los aeropuertos”, dijo un grupo de profesores de la Universidad de California, y señaló que las únicas pruebas realizadas fueron las hechas por los fabricantes de los escáneres.
Vale la pena recordar que esta misma tecnología de escaneo está siendo desplegado por gobiernos y sus agencias de Seguridad Nacional a lugares como estadios, puntos de control y en tamaños más pequeños en los juzgados, centros comerciales e incluso algunas escuelas.