1010 Global: Niños Asesinados por No Reducir Su Huella de Carbono
October 3, 2010
Paul Joseph Watson
Un nuevo comercial sobre el cambio climático publicado por una “destacada” organización mundial, 1010 Global, que lucha contra el “calentamiento global” muestra como niños en su sala de clases son asesinados por no reducir su huella de carbono. Los niños, ecépticos del calentamiento global antropogénico, son grotescamente volados en mil pedazos con las tripas y la sangre salpicando por todas partes, un recordatorio alarmante del hecho de que la agenda ambiental no es más que un velo de una religión repugnante de muerte, y que el movimiento con vehemencia cada vez más desacreditado está desesperado por hacer del calentamiento global un instrumento para avanzar su agenda. Aquellos que no concuerden, dice el video, no tienen porque sentirse presionados. Simplemente son asesinados.
Bajo el título “No hay presión”, el clip comienza mostrando un profesor lavándole el cerebro a los niños sobre las emisiones de CO2, antes de volarle la cabeza a dos niños que no están de acuerdo y se niegan a reducir su “huella de carbono”.
El video sigue en el mismo orden de ideas, como los escépticos del calentamiento son liquidados y sus cuerpos horriblemente destrozados por tener la osadía de sostener un punto de vista diferente, en escenas que no estarían fuera de lugar en una película de terror que le revuelve el estómago a cualquiera.
Vea el clip a continuación
Aturdida por la reacción masiva que el video ha generado en tan sólo las primeras horas de su lanzamiento, la organización detrás de la maniobra, 10:10 Global, (mándeles un e-mail a hello@1010uk.org) retiró el clip de su propio sitio web. “Lo siento, este vídeo está fuera de servicio por ahora. Más información muy pronto “, reza el texto en la página en la que el vídeo antes parecía.
Este video representa uno de los últimos arrestos del moribundo movimiento ambientalista volcado a mantener vivo el asunto del calentamiento global antropogénico. El nivel absoluto de desesperación, el vitriolo y la idiotez que figuran en el clip de cuatro minutos es indicativo de un grupo ideológico que está perdiendo el debate científico y por lo tanto son obligados a recurrir a la propaganda burda y vil, en un intento de empujar su mensaje desacreditado por las narices de la gente.
“¿Qué estaban pensando? No estaban, porque esto va a tener un efecto exactamente contrario al que tenían en mente. No tengo palabras para describir mi disgusto con el vídeo “, escribió el prominente ecéptico del cambio climático Anthony Watts.
“Este es el discurso del odio, puro y simple. Legitima casi cualquier acción en contra o la caracterización de los que no están de acuerdo con la versión más histérica de catastrófica y cataclísmica del clima. “disparen a todos y dejen que Dios se encargue de ellos”, escribe Thomas Fuller.
El uso de niños de diez años de edad, como actores y víctimas es un toque particularmente ingenioso.
Cuando DDB creó un anuncio que muestra WWF estrellándose contra el World Trade Center para pedir apoyo para el activismo verde, era grotesco, de mal gusto y un insulto a todos los que sufrieron pérdidas el 11 de septiembre de 2001. Hubiera sido imposible imaginar una más cruda, llamada al activismo verde.
Hasta ahora.
Para cualquiera que se pregunta por qué los escépticos no confían en los comunicados presentadas por sus equipo, deberían preguntarse hasta qué punto cualquier signo de razón podría estar contaminado por el hedor de basura como esta.
El Físico Checo Luboš Motl va aún más lejos en su condena del clip, la descarga en la actríz de X-files Gillian Anderson, que proporcionó la voz en off del vídeo. “Es ella realmente una aberración nazi como aparece?”, Motl pregunta.
El movimiento 1010 escogió promover abiertamente el genocidio. No es simplemente la promoción …. Lo están planeando. Son realmente la planificación de formas de como reducir las emisiones globales de CO2 en un 10% al año. Y, en efecto, el genocidio similar al que presentan en el video es la única manera plausible como eso se puede lograr.
La CIA, el FBI, y otros deberían ir tras el cuello de la escoria inhumana responsable del movimiento 10:10 y aquellos que los protegen. Estas personas son una amenaza real no sólo para nuestro bienestar, sino para nuestra salud y vida.
“James Lee se suicidó demasiado pronto; seguramente habría estado encantado por esta película”, añade Motl, refiriéndose al hombre armado que entró en un edificio de Discovery Channel con explosivos y tomó rehenes en una protesta contra la falta de atención sobre el calentamiento global antes de ser asesinado por la policía.
Al igual que los personajes en el video, Lee expresó su inclinación por matar a los bebés y los niños en una carta publicada en Internet antes de sus acciones.
La visión enferma y retorcida del movimiento 10:10 de asesinar a los escépticos del calentamiento global antropogénico y de hecho cualquier persona que se niegue a adoptar su sistema de creencia es compartida por la inmensa mayoría de prominentes alarmistas del cambio climático.
Como se ha documentado exhaustivamente, el movimiento del calentamiento global no es más que una fachada para la religión de la muerte – neo-eugenesia – y la agenda para imponer medidas draconianas de control de la población y el fascismo ecológico en nombre de salvar al planeta.
Los líderes de este nuevo culto incluyen personas como el guru ambientalista finlandés Pentti Linkola, que ha pedido que quienes nieguen el cambio climático sean “reeducados” en campos de concentración ecológicos y que la gran mayoría de los seres humanos se mantengan el resto de sus vidas esclavizados y controlados por una Policía Ambientalista liderada por el Estado. El además sugiere que las personas sean esterilizadas a la fuerza, que sus coches sean confiscados y que se restrinjan los viajes a todos, excepto a los miembros de la élite.
Linkola fervientemente disfrutaría usar el botón rojo que muestra el anuncio del movimiento 1010 para liquidar los escépticos, ya que dijo una vez que una nueva guerra mundial sería “una ocasión feliz para el planeta”, ya que acabaría con decenas de millones de personas.
Como hemos documentado, aunque no va tan lejos como Linkola, el movimiento eco-fascista está atrayendo a defensores prominentes, incluyendo a James Lovelock, el creador de la hipótesis Gaia. Lovelock declaró a The Guardian a principios de este año que “la democracia debe ser suspendida” para combatir el calentamiento global y que “algunas personas con autoridad” deberían controlar el planeta.
Este sentimiento fue compartido por el autor y ambientalista Keith Farnish, quien en un libro reciente llamó a que se cometan actos de sabotaje y terrorismo ambiental como destruir represas y la demolición de las ciudades con el fin de devolver el planeta a la era agraria. Otro prominente alarmista de la NASA y del calentamiento global aliado de Al Gore, el Dr. James Hansen aprobó el libro de Farnish.
Otra figura destacada en el debate sobre el cambio climático que ejemplifica el sistema de creencias violento y obsesionado por la muerte del movimiento es el Dr. Eric R. Pianka, un biólogo estadounidense que trabaja en la Universidad de Texas en Austin. Durante un discurso ante la Academia de Ciencias de Texas en marzo de 2006 Pianka defendió la necesidad de exterminar a un 90% de la población mundial a través de los virus de ébola en el aire. La reacción ante el discurso presenciado por profesores y científicos no fue una de shock o repulsión; sino que se pusieron de pie y aplaudieron a Pianka por sus ideas de genocidio en masa.
El actual zar de la ciencia de la Casa Blanca, John P. Holdren también defiende las prácticas más obscenamente dictatoriales, eco-fascistas, e inhumanas en nombre del ecologismo. En su libro de 1977 Ecoscience, Holdren pide un “régimen planetario” para llevar a cabo abortos forzados y procedimientos de esterilización obligatoria, así como drogar el suministro de agua, en un intento de sacrificio de los excedentes humanos.
Dado que estos son los individuos a la vanguardia del movimiento ecologista, es una sorpresa que ahora estemos viendo sus puntos de conversación apareciendo en comerciales depravados y corruptos como el clip del movimiento 10:10 Global, que promueve abiertamente la idea de una solución “definitiva” para los disidentes que se niegan a ser adoctrinados por el culto que ellos lideran.
Esta película demuestra más allá de toda duda que los alarmistas del calentamiento global antropogénico han verdaderamente perdido el debate científico racional en cuanto a las causas del cambio climático y acaban recurriendo a amenazas sobre cualquier persona quien no esté de acuerdo con ellos.
Aunque la organización detrás de esta película espera marcar el 10 de octubre como la fecha en que su mensaje eco-fascista sería ampliamente difundido, como resultado directo del tono vulgar y aterrador de la película, todo lo que han realmente logrado es sembrar la semilla de su propia destrucción, y la garantía de que 10:10 será recordado como otro clavo en el ataúd del alarmismo del calentamiento global.
Paul Joseph Watson es el autor del libro Order Out Of Chaos y escritor para el sitio prisonplanet.com